La arquitectura da forma a nuestras vidas. La calidad de las relaciones, la cultura, los espacios y la salud física y mental de quienes habitan las ciudades dependen directamente de esta. Es, ante todo, una expresión directa de nuestra historia como sociedad, las aspiraciones que tenemos a futuro y nuestras formas de vida actuales.
Por ello deberíamos entenderla como una solución a los problemas y no como un factor de discusiones. Justo a esta idea le apuesta para 2022 el gobierno de España con la aprobación de la Ley de la Calidad de la Arquitectura. La misma, se plantea como “instrumento legislativo necesario para consolidar un nuevo modelo de transición económica, energética y ecológica que promueva una mayor inclusión y cohesión social”.
La misma entró en vigor a partir de enero de este año, en medio del contexto de cambios constantes y adaptación que implica la pandemia del Covid 19 con la que venimos conviviendo desde el año 2020.
Aún hoy, dos años después de declarar cuarentenas en gran medida permanentes en casi todo el mundo, seguimos, como sociedad, adaptándonos a esta nueva forma de vida.
Nuestros espacios sociales, laborales y familiares se redujeron a uno mismo: nuestro hogar. Esto puso en manifiesto las principales falencias de la arquitectura con la que diseñamos las ciudades hasta ahora.
Construir, con planes urbanos pensados a nivel estatal y el bienestar social, medioambiental y en cuestión de género como premisa principal se convierte en una necesidad básica de los gobiernos para asegurar la calidad de vida de sus ciudadanos.
Eso es justo lo que busca la Ley aprobada en España, así como otras propuestas en años anteriores en varios países europeos y otras que se desarrollan actualmente en todo el mundo. La legislatura española, en específico, “velará por asegurar que tanto la nueva arquitectura como las actuaciones que se realicen en los entornos construidos se efectúen desde un enfoque integral e integrador”, anuncia Iñaqui Carnicero, Director General de Agenda Urbana y Arquitectura de España.
Esto implica concentrarse en rehabilitación energética de lo ya construido, al tiempo que el esfuerzo se enfoca también en cuestiones de accesibilidad, habitabilidad, iluminación y ventilación natural como aspectos clave para la calidad de vida habitacional.
Bajo esta premisa, entonces, se desarrollan las principales tendencias de arquitectura que veremos en los próximos años. A continuación te explicamos un poco más las principales.
Consumo energético responsable y materiales sostenibles
El nuevo consumidor busca, ante todo, materiales responsables con el ambiente, sostenibles y socialmente correctos.
Energías renovables, insumos con impacto mínimo para la huella de carbono, sostenibilidad, materias primas reciclables y con bajo consumo de energía son los principales a elegir para las construcciones en adelante y para todos los niveles de la industria en general.
Atrás quedaron los días en los que el consumidor no se preocupaba por el trasfondo de los productos antes de comprarlos. En especial, el apoyo a la industria local y producción responsable se vuelven clave a la hora de tomar las decisiones.
En Glasst Innovation Company somos conscientes de este cambio e innovamos diariamente con la tecnología al servicio de nuestros productos para transformar insumos en materiales cada vez más responsables con el ambiente y con la salud de quienes los utilizan.
En específico contamos con tres soluciones de producto principales que reemplazan materiales abrasivos, contaminantes y/o tóxicos existentes en el mercado.
● Protector Universal: Una película removible, protector de ventanas y puertas, o para todo tipo de superficies en obra o remodelación. Se trata de un producto único en el mercado, biodegradable y que permite reducir a cero el uso de plásticos de un solo uso a la hora de asegurar la calidad de tus acabados.
● Desmoldante para concreto: 100% amigable con el ambiente y cero tóxico que reemplaza otros productos abrasivos presentes en el mercado a base de combustibles fósiles sin sacrificar la calidad de los acabados del concreto visible en tus obras.
Flexibilidad y adaptabilidad
Los cambios constantes y la velocidad a la que se mueven las sociedades actuales no es la misma que hace un par de décadas. Tecnologías de la información, inmediatez de contenidos, la evolución del internet y las dinámicas mismas de la sociedad marcan el paso de evolución de las ciudades.
Como sociedad, es indispensable pertenecer a algo, un grupo, una cultura o una familia. El diseño arquitectónico y las nuevas propuestas de desarrollo deben ser compatibles con estas formas de vida y aportar a la sensación de tener o pertenecer a un lugar.
Un edificio que no sea flexible y esté pensado para adaptarse a los cambios que llegan cada vez más rápido, no es sostenible en el tiempo. Es necesario que cada diseño nuevo sea modular y expuesto, de forma que los cambios se apliquen fácil y rápido.
Flexibilidad y adaptabilidad
Antes que nada, bienestar. Ese es el objetivo.
Las nuevas casas, edificios multiuso y espacios sociales deben tener esto como premisa. Lo principal es la salud física y mental de las personas. Por esto, los diseños arquitectónicos que se propongan en los próximos años deben tenerlos como núcleo para sus propuestas.
Esto incluye pensar espacios que propicien sensaciones de tranquilidad y bienestar en general. Inclusión de la naturaleza en los espacios internos como método de conexión a través de plantas de interior y jardines verticales.
Rediseño de espacios compartidos para minimizar la contaminación visual, el ruido y la sobrepoblación se hacen fundamentales al pensar las oficinas. Las tendencias de coliving y coworking permiten crear espacios que separan el trabajo de las viviendas al tiempo que crean espacios colaborativos de ocio y concreción de proyectos. Nos juntamos para ejecutar ideas, mientras que mantenemos los espacios privados para la creatividad.
Iluminación natural, colores neutros y decoración integrativa completan los espacios en los que pasamos la mayoría del tiempo. Se trata entonces de lograr un diseño arquitectónico efectivo y funcional, sin dejar de lado la estética y vanguardia de los espacios.
Esto además, se respalda con certificaciones de calidad como CASA, para construcción sostenible enfocada en la calidad de vida de los hogares en Colombia a los que puedes sumar puntos utilizado nuestros productos Glasst enfocados al bienestar de quienes habitan y construyen los espacios con niveles de toxicidad nulos y cero uso de compuestos orgánicos volátiles.
Espacios de uso mixto
Cada vez son más las personas que se acostumbraron a teletrabajar en homeoffice a partir de las cuarentenas implementadas en el último año y la proliferación de tecnologías remotas.
Parece que esta flexibilidad llegó para quedarse. Encuestas realizadas a nivel. Cerca de 50% de las empresas consideran beneficioso mantener el teletrabajo incluso una vez termine la pandemia. Mientras que 40% de los empleados manifiestan querer trabajar desde sus casas cerca de la mitad de las jornadas.
Esto genera beneficios en productividad, ahorros en tiempo y costos de presencialidad.
Sin embargo, sugiere también que las personas seguirán pasando la mayoría de su tiempo en espacios privados o de trabajo conjunto. Por lo tanto, es necesario diseñar los espacios en función de productividad y comodidad para las personas.
Conectividad, diseño modular y espacios agradables y funcionales que transmiten interés por mantenerse y por la comodidad con lo propio son clave.
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