La producción de vidrio es una actividad muy contaminante para el medio ambiente. Esto se debe principalmente a tres factores clave durante su producción: la emisión de gases a la atmósfera, la contaminación por aguas residuales y la contaminación por mala disposición de residuos sólidos.
Con respecto a las emisiones, son el factor más contaminante durante el proceso de producción de este material. El vidrio se fabrica a altas temperaturas en hornos que emiten entre un 80% y un 90% de las emisiones de contaminantes a la atmósfera generadas en su producción.
Esto contribuye en gran medida a la generación de gas que genera el efecto invernadero, toda vez que la mayoría de las industrias mantienen procesos de producción de 24 horas sin parar, con descansos mínimos de mantenimiento. Es decir, no paran de emitir humo prácticamente nunca.
Por su parte, el manejo de aguas residuales en la industria del vidrio se da al refrigerar los hornos en los que se calienta el vidrio y su posterior purga. Su impacto en el ambiente, aunque uno de los menores en la industria, es significativo.
Así mismo, estas descargas pueden estar afectadas por ciertos materiales químicos que durante el proceso de creación del vidrio se pasan al agua utilizada.
Aun así, siempre será mejor utilizar procesos y materiales que aporten al ahorro de agua en la mayor medida posible, antes que generar una demanda adicional de material nuevo que sume cada vez más a este desperdicio.
Recuperar o reutilizar algo, siempre, será mejor opción para el cuidado del ambiente que generar uno totalmente nuevo desde cero.
En cuanto a los residuos sólidos, la contaminación por su disposición se da principalmente en las zonas de transporte y se previene manteniendo las zonas de recepción del material limpias y evitando que los residuos que llegan se mezclen con el producido en la planta o almacenado previamente.
Aun con estos factores de contaminación, el uso de vidrio como tal, es uno de los más respetuosos con el cuidado del ambiente. Pues se trata de uno de los pocos materiales en la industria que puede ser recuperado en un 100%.
Además, puede ser procesado en varias oportunidades, lo que lo hace aún más valioso como producto sostenible.
Aún con todo esto, en Glasst Innovation Company, nos enfocamos en ir más allá de las soluciones estándares, buscando siempre la innovación y tecnología para obtener resultados más óptimos que retan el status quo de la industria.
Es por eso que con el propósito final de cuidar ambos, el planeta y tu bolsillo, desarrollamos un servicio de restauración de vidrios que te permite recuperar los cristales rayados en su totalidad sin necesidad de reemplazarlos. Así ahorras en los costos finales de tus proyectos o de los mantenimientos de tu vivienda, oficina y hasta tu vehículo.
A continuación te contamos cómo utilizamos la nanotecnología y fibras especiales diseñadas por nosotros y únicas en el mercado para ello.
Un proceso químico que devuelve tus vidrios a su estado original sin afectar su composición
Siempre será mucho más práctico y económico restaurar un vidrio que reemplazarlo por completo. Sin embargo, la mayor preocupación a la hora de contratar este tipo de servicios se basa en los resultados finales.
Por esto, nuestro Sistema de Restauración de Vidrios Glasst utiliza la nanotecnología aplicada para eliminar rayones y manchas en todo tipo de vidrios con resultados excelentes.
Para ello utilizamos felpas hechas de silice activo (el mismo material del que está hecho el vidrio) y ponemos la nanotecnología a tu servicio para lograr resultados a través de una acción química y física combinada que devuelve a tus piezas su acabado y brillo originales.
Esto lo hacemos en cuatro etapas:
- Se remueve por completo el rayón a través de la reacomodación de las moléculas dejando un campo tipo nube.
- Se desvanece el campo tipo nube generado, eliminando cualquier rayón de la superficie y dejándola lista para comenzar con la recuperación del brillo.
- Se utiliza un tipo de felpa diferente y un compuesto especial fabricado a base de Silice para obtener un resultado impecable. El vidrio queda como nuevo y sin ningún rayón o mancha a la vista.
- Al finalizar el proceso se realiza una reorganización de las moléculas en la superficie para que el vidrio quede con su aspecto original sin generar distorsión en el mismo.
Nuestro sistema para la restauración de vidrios es más rápido, más efectivo y más económico que otros en el mercado por su uso efectivo de la tecnología. Es por eso que se trata de tu mejor opción cuando quieres recuperar un vidrio estropeado sin necesidad de reemplazarlo por completo.
Además, puede ser empleado en todo tipo de vidrios de diferentes ámbitos privados y laborales, incluyendo templados, blindados, laminados, de alto impacto, crudos, curvos, termoacústicos y espejos. Es decir, puedes utilizarlo en cualquier vidrio que quieras, tanto para tu oficina como para tu casa y hasta tu auto.
Se trata también de un proceso más verde que el común depósito de este material, pues no se genera residuo alguno que alcance el ambiente o impacto visible del daño en tu cristal. Esto debido al uso de las últimas tecnologías en el mercado para la restauración y que no alteran alterar las propiedades físicas o químicas del vidrio.
Este sistema aporta también al ahorro en la mano de obra y costos de transporte que genera desmontar un vidrio al tiempo que actúa como una solución mucho más rápida, al tiempo que disminuye riesgos de cortes o accidentes propios del desmontaje tradicional para el reemplazo.
Y lo más importante, en Glasst te garantizamos el resultado del proceso. Somos la mejor manera de cambiar el presente para un futuro ideal.
Si quieres conocer más sobre el proceso de restauración de vidrios o nuestros otros productos puedes encontrar información o contactarnos entrando a nuestro blog.